La importancia de leer cuentos con nuestros hijos

La sencilla rutina de contar un cuento antes de ir a dormir a los más pequeños de la casa ofrece todo un mundo de posibilidades y ventajas para el crecimiento intelectual de nuestros hijos. Dejarse llevar por las historias o ponerse en el lugar de los personajes potencia el amor por la lectura y fortalece el vínculo entre padres e hijos. Como padres no debemos perder la oportunidad de crear ese vínculo de complicidad.

Algunos de los beneficios, desde el punto de vista educativo, que conseguiremos si creamos en nuestros hijos la rutina de leer y compartir cuentos son:

–Estimula el lenguaje y la atención. 

Escuchar diariamente gran variedad de palabras enriquece el vocabulario de los niños, a la vez que su expresión y ayuda a aumentar su nivel de comprensión. Además, se fomenta la atención y les sirve para aprender a concentrarse en una actividad determinada.

-Fomenta futuros lectores.

Cuando los niños aún no leen por sí mismos, la lectura de cuentos infantiles en voz alta por parte de los padres tiene un valor especial y único. Los niños disfrutan del sonido y de las imágenes que acompañan a la palabra escrita. Cuando serán mayores y puedan leer por ellos mismos será más fácil tener adquirido este hábito y que sea una actividad placentera.

– Disfrute en familia.

Cuando compartimos la lectura de todo tipo de cuentos infantiles, hacemos que el niño participe de una experiencia gratificante y afectiva, fortaleciendo la relación entre padres e hijos. No hay nada que guste más a los pequeños que compartir momentos con papá y mamá.

-Desarrolla la creatividad e imaginación 

Los cuentos ayudan a despertar la imaginación desarrollando la capacidad de visualizar personajes, lugares y circunstancias. Asimismo, despiertan la creatividad para elaborar historias o encontrar soluciones a las distintas situaciones que se plantean en el relato.

-Ejercita y desarrolla la mente.

Con los relatos, los niños, aprenden a discernir entre lo bueno y lo malo, se les prepara para las dificultades de la vida y a afrontar acontecimientos que no siempre serán de nuestro agrado. Estas breves historias llenas de animales y personajes ficticios nos demuestran que está en nuestras manos luchar contra estos sucesos. 

-Fomento de valores. 

En los cuentos encontramos el valor de la amistad, del amor, de la lealtad. Además, podemos observar cómo gestionan las diferentes emociones los personajes.

Os animamos a crear la fácil rutina de contar cuentos antes de ir a dormir ya que la lectura de un cuento, compartida con los padres, es un hecho afectivo, creativo e intelectual de enorme peso en el desarrollo de los niños y ayuda a que la conexión que vincula a un padre/madre con su hijo sea mucho más fuerte.